viernes, 15 de septiembre de 2023

«Chicas de hoy», Lecturas y Recreativos (1982)


1982

John Flavers : Todo por un amigo
Laura García Corella : Muchachas inquietas
Betsi Miller : Fugas inútiles
Lidia Carbonell : Vivir de ilusiones
Deborah Lindsay : ...Cuando las menores se enamoran de señores
        con canas
Adriana Montesol : Volver a empezar


Rustica. 128 páginas más cubierta.

«Los Jaguares», Editorial Fher (1985 — 1986)


1985

01 : Laura García Corella : El misterio de «los intocables»
02 : Laura García Corella : Contra «los destructores»
03 : Laura García Corella : ¡¡ Chantaje !!
04 : Laura García Corella : El secreto del Inca

1986

05 : Laura García Corella : Atrapados en la selva
06 : Laura García Corella : Peligro en el mar
07 : Laura García Corella : Operación diamante
08 : Laura García Corella : El galeón hundido
09 : Laura García Corella : Misterio en el castillo
10 : Laura García Corella : Alarma en Venecia


Con ilustraciones de Carles Prunés.

Tapa dura. 132 páginas más cubierta. 14 X 19.

«Panda del cuatro y medio», Edivas Ediciones (1986)


1986

01 : Loretta Grey : Vacaciones en la nieve
02 : Loretta Grey : El diamante de la reina
03 : Loretta Grey : El caso de los espías
04 : Loretta Grey : El enigma del cuadro
05 : Loretta Grey : El legado del corsario
06 : Loretta Grey : Travesía accidentada

Con ilustraciones de Javier de Villa

Tapa dura. 112 páginas más cubierta. 13,5 X 19,5.

Loretta Grey es el seudónimo de Laura García Corella, verdadera autora de las novelas, a pesar que sea presentada en los libros solamente como la responsable de la versión española.

jueves, 14 de septiembre de 2023

Dave Johnstone, de reclamado a sheriff


Como se ha hablado bastante de Gary Salkow estos últimos días, aprovecho para hacer algo que tenía pendiente desde tiempo : agradecer al compañero Dibert Pruence Piñeyro por haberme permitido leer su novela «Dave Johnstone, de reclamado a sheriff».
¿ Cual puede ser el vínculo entre las dos cosas ? se preguntaron tal vez los más despistados de vosotros...
Es que en este bolsilibro digital, publicado hace ya tres años, aparece precisamente Gary Salkow y aunque sea en un papel secundario, no por eso su participación resulta menos importante para la resolución de la trama.
Por lo demás, aparte de esta «estrella invitada», la novela tiene los mismos alicientes que «Berna, un juez disparatado» del mismo autor. Un estilo ameno, algo de humor y una historia interesante que no rehúye las digresiones argumentales, proponiendo así, sea de forma intencionada o no, una trama peculiar y una narración coral del mejor efecto.
Sin embargo, respecto al bolsi publicado por «Matraca ediciones», éste tiene dos pequeños defectos. Nada realmente grave, pero seguro que la novela se habría beneficiado de una corrección más rigurosa y el estilo en general del uso, a veces, de un diccionario de los sinónimos.
Por suerte, estos fallos no resultan tan importantes como para estropear el placer de la lectura. Así que ¡ enhorabuena otra vez Dibert Pruence Piñeyro !

sábado, 9 de septiembre de 2023

Bolsilibros y gastronomía XXXV


Para acompañar la lectura de «Pulp reality», cociné カレーパン (pan de curry). Era la primera vez y confieso que estoy bastante satisfecho con el resultado, ya que han quedado casi tan sabrosos como el bolsi de Alan Dick, jr. / Alfonso M. González.

Reseñas de Alan Dick, Jr. I

D.A.N.S. – Enviado Secreto nº 3, Bruguera (1967)

Para situaros de la manera que considero más rápida y efectiva, creo que hay que ir al grano: James Bond.
El agente secreto creado por Ian Fleming está triunfando en las adaptaciones a la gran pantalla. Estamos a mediados de los sesenta, supongo que se suscitaría una moda o fiebre por los agentes secretos, sospechosamente parecidos al mítico 007.
Y los bolsilibros eran cultura popular, se apuntaban a este tipo de tendencias que pudieran generar interés y ventas. Así que esta colección D.AN.S. - Enviado Secreto sería un trasunto del cine de explotación. En este caso, aplicado a las publicaciones de quiosco.
Hasta aquí todo normal. Lo que se presenta como rara avis, y debe ser algo fuera de lo común en los bolsilibros es en lo referente a otros aspectos de la misma. Me refiero a que estamos ante una colección con algo muy similar a un universo compartido. Normalmente, las editoriales no apostaban por las sagas, secuelas o series con personajes recurrentes. Sin embargo, aquí tenemos la excepción que confirma la regla: cuatro agentes secretos, escritos por sendos autores, en su mundo de ficción propio que se desarrollaba dentro de esta colección.


Y al bueno de Silver Kane le tocaba hacerse cargo de las aventuras de EO-004. O lo que es lo mismo: Johnny Klem. Esta Infierno en el trópico sería, de hecho, la primera entrega donde presenta al personaje.
Y os tengo que confesar que me frotaba las manos. Me explico. Me gusta mucho este autor. A estas alturas ya había dado muestras suficientes de manejarse bien en tramas de espionaje, policiaco, novela negra y todo este tipo de contenidos. Además, esta publicación de agentes secretos, o enviados secretos como los quisieron renombrar aquí, proponía en principio revestirse con algunos elementos de ciencia ficción. O sea: música para mis oídos.
No obstante, este primer número de Johnny Klem me ha decepcionado.
La premisa es simple: el gobierno está preparando unas pruebas de armamento nuclear y unos villanos de turno quieren aprovechar para cometer un atentado bajo ese conveniente escenario. Y, como no podía ser de otra forma, D.A.N.S (que no lo he dicho, pero son las siglas de Departamento Atómico Nacional de Seguridad) tendrá que impedirlo, en esta ocasión a través de su eficiente agente E-004.
Encontramos a Francisco González Ledesma aparentemente desmotivado en esta novela corta. Me da la sensación de que desprende un aroma a funcionario cumplidor, pero falto de pasión. Como a él mismo le gustaría decir: apostaría que fue escrito maquinalmente.
Está claro que es comprensible que con el ritmo de trabajo que llevaban los autores de la novela popular patria haya altibajos en sus obras. Infierno en el trópico nunca acaba de despegar, en mi humilde opinión, y deja un sabor de boca no malo, pero tampoco agradable.
Para comenzar hay problemas con el propio protagonista. Es cierto que los personajes pulp no son un compendio de virtudes en cuanto a profundidad y desarrollo de los mismos, entre otras cosas por la extensión de estos libros que no dan para explayarse demasiado. Aunque en el caso de Johnny Klem este tema es sangrante. Se trata quizá del personaje menos trabajado que he visto en una novela de Silver Kane. Y esto tiene más delito, al ser este bolsilibro un número que sirve de presentación y supuestamente fundacional de este 004.
Quizá pensaréis que siempre nos queda el antagonista. Ese villano malvado e inteligente, que tan bien encaja en este tipo de intrigas, y que planea la destrucción del mundo con una avanzada tecnología y poder económico. Aquí, ese honor recae en una fémina: Mara. Una escultural, fría y calculadora mujer, pertrechada con un ejército de fieles siervos y unas ansias de poder y filosofía de vida que no admiten mucho escrutinio… ni lógica. Un personaje tan desaforado que cae en más de una ocasión en lo absurdo. Como muestra un botón: uno de sus acólitos (que disimula su maldad con el nombre de Devil), recoge una gaviota del mar por orden de Mara, y lo hace con los dientes y se la entrega cual perro fiel a sus pies.
Y no deja de ser curioso, porque Silver Kane sabe en ocasiones manejar este tipo de bretes con humor, como ha demostrado en muchos de sus westerns. Sin embargo, aquí todo este tipo de comportamientos parecen ir en serio, lo que puede dejarnos algo fríos.
Espías, agentes secretos, amenazas tecnológicas y todo este nicho estilo James Bond suele dar pábulo a aparatos increíbles o gadgets ultramodernos. En este terreno sí que reconozco que este bolsilibro nos puede sacar alguna que otra sonrisa, tras casi sesenta años desde su publicación. Es inevitable que en algunos pasajes lo que se nos describe como el no va más de los avances tecnológicos, como puede ser una cámara fotográfica muy pequeña o un transmisor ultra avanzado, pueda hoy quedar en ridículo con el móvil chino más barato que tengamos guardado en un cajón cogiendo polvo. Percibimos un ambiente retro y kitsch, cuando menos entrañable.
Y entre esos ingredientes se va cocinando esta aventura para salvar al mundo de Johnny Klem. Tiene lugar en gran parte en Nassau, la capital de las Bahamas. Y entre playas, clubs exclusivos para millonarios, yates de alto copete y alguna funeraria que produce muertos bien frescos, el bueno de Silver Kane despacha esta novelita.
Haciendo balance, no es que sea un bolsilibro horrendo, pero, como comentaba, personalmente esperaba más. Quizá el propio espíritu de la colección no encaje del todo con la personalidad de Ledesma; que se suele encontrar más a gusto en obras de cierta denuncia social, antihéroes y ambientes más cercanos al spaguetti western. Aquí, en contraposición tiene que lidiar con villanos de opereta y gobiernos intachables, así como con protagonistas que son epítomes de virtudes… Tal vez se halle un tanto desubicado, forzado.
En todo caso, lo comprobaré y ampliaré mis conclusiones cuando haya leído otra entrega de este E-004. Porque sí, hay que darle otra oportunidad.

Alfonso M. González