miércoles, 16 de septiembre de 2020

Contigo para siempre, de María Teresa Sesé


Detrás de este título anodino (a alguien le parecerá incluso cursi), se esconde una narración cojonuda de María Teresa Sesé.
Publicada por primera vez en julio de 1971, la historia usa como telón de fondo a la guerra en Vietnam, nada menos.
Esto ya puede parecer bastante singular, cambiando mucho de los entornos de la media / alta burguesía yankee o parisina al que el lector / la lectora de este tipo de novelas está habituado, pero hay más...
Ada Clayton es una joven profesor decidida a llevar a cabo la serie de conferencias sobre la paz que debía dar su padre, recién fallecido, y por eso se traslada a Vietnam, en contra del aviso de sus familiares.
Desgraciadamente, apenas llegada a su destino, un comando vietnamita la secuestra y, en unas escenas bien resueltas, que no desentonarán en una novela de espionaje, la llevan en las profundidades de la jungla.
Aquí, Ada encontrará a un apuesto comandante, Minh-Ho, y al mismo tiempo al amor y al deseo.
La inteligencia de la autora es que en ningún momento presenta la atracción entre los dos como algo forzado o turbio.
El amor que sientan sus personajes no es algo exótico y tampoco la relación sadomasoquista de un carcelero y de su presa... Los dos solo son un hombre y una mujer, sin distinción de colores o de cultura, que se aman y hacen el amor.
Además de todo esto, la resistencia vietnamita, sin por eso que María Teresa se equivoca a halagar al comunismo, es presentada bajo un aspecto favorable. En efecto, para ella no se trata de una cuestión ideológica, sino de la lucha de liberación de un pueblo atacado en su soberanía por potencias extranjeras.
Otra prueba de la singularidad de esta novela es que al contrario de lo que hacían los yankees durante la misma época en sus abominables películas, nunca los combatientes vietnamitas son presentados aquí como bestias sedientas de sangre. Hasta el punto que Minh-Ho, cuando recibirá la orden de ejecutar a Ada, no dudará en desobedecer a sus superiores y en dejar a la joven en libertad. Sin importarles las consecuencias...
En cuanto al final, es a la vez evidentemente previsible y bastante sorprendente.
Desde luego habrá amor eterno (el título habla claro desde el principio) pero no se menciona ninguna boda y, además, Ada sin parar en los riesgos, decidirá seguir a Minh-Ho para vivir con él en Vietnam.

2 comentarios:

  1. Que buena reseña Stéph!! Interesante elección de la ambientación. Es lo bueno de la lectura de bolsilibros, cuando crees que se vuelven repetitivos, por algún lado te sorprenden.

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    1. Muchas gracias Herik.
      Indudablemente María Teresa Sesé es una autora de calidad y sus novelas siempre suelen ser bastante originales (y a veces también feroces, burlándose de los ricos y de las convenciones sociales).
      No estoy acostumbrado a escribir reseñas, pero en este caso me ha parecido una buena oportunidad para subrayar la necedad de muchas opiniones que se pueden encontrar en la red tanto acerca de la novela romántica en general que sobre el carácter supuestamente anticuado de la moraleja de los bolsilibros...
      Pero no creo que sirve de mucho, porque hay pendejos que nunca aprenderán, desgraciadamente...

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