A simple vista aquellas joyas me parecían buenas, aunque debo reconocer que no soy un experto. Necesitaría instrumentos adecuados para examinarlas detenidamente y dar un veredicto.
— Una habitación... Eso son — continuaba Alberto Franciolini vociferante —. ¡ Una perfecta imitación !
Adam Surray
Morir en Italia
Muchas gracias al amigo Domingo por señalarme esta otra hazaña de los linotipistas creativos. Un abrazo !
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